Consejos para tener un césped en estado óptimo.

Lo primero que debemos tener en cuenta es la elección de nuestro césped, y vamos a tener que tener en cuenta los siguientes puntos:

  • El clima: si es un clima seco, fresco, suave, etc., ya que determinará la cantidad de riego y de abono que necesitará, y por ende, el gasto económico.
  • Dónde va a estar ubicado nuestro césped: si va a estar en una explanada con sol directo, o entre árboles, en una sombra, bajo techo…
  • El tipo de suelo: casi todo el césped se acopla a la mayoría de los suelos, excepto alguna variedad.
  • Qué papel va a tener el césped en nuestra casa, jardín, o donde quiera que esté: ya que no es lo mismo si van a estar jugando niños continuamente, o si no lo va a pisar nadie y va a tener un papel más estético.

QUÉ TENER en tu jardín

  • Aireado y escarificado: esto se hace para evitar que el césped se apelmace y que crezcan malas hierbas o musgo. Sólo necesitaremos una horca para agujerear el césped en dos pases perpendiculares. Se suele hacer dos veces al año, en primavera y en otoño. En abril es la mejor época para hacer el aireado, puesto que es cuándo nuestro césped crece sin ningún tipo de control y es cuando necesita una mejor aireación.
  • Fertilización: unos tipos de césped necesitarán más y otros menos, pero a todos les viene fenomenal la fertilización, además con ella se impide en gran parte el crecimiento de las malas hierbas. Es importante que el fertilizante tenga suficientes minerales como calcio, magnesio y hierro. En cada envase te van a explicar cómo hacerlo, pero por lo general se suministra de 30/35 gramos por metro cuadrado.
  • Abonado: se empieza a abonar en febrero/marzo. El abonado estacional se hará de abril a septiembre. En otoño de octubre a diciembre, y para nuevo césped, después de preparar la tierra y después de sembrar.
  • Rulado: solo se hará si el suelo es muy seco, ya que si el suelo es muy arcilloso se hará lo contrario que es el aireado. También se hace el rulado para nivelar el suelo o meter raíces al rastrillar.
  • PH: se tiene que encontrar entre 6 y 7, es decir, suelos más bien ácidos.
  • Recorte de bordes: si tenemos que limitar el césped por un camino, o por cualquier motivo, utilizaremos una perfiladora o una pala jardinera, que dando un golpe seco cortaremos de una manera muy limpia.
  • Limpieza de hojas en otoño: puede hacer que eviten que dé el sol a nuestro césped, o que lo asfixie porque hacen un efecto invernadero, ni qué decir tiene que una sopladora es la mejor opción.
  • Eliminación de malas hierbas: es importante para que veamos el césped bien. Para el caso de un campo de golf o de fútbol, vamos a tener que tirar de herbicidas, porque la idea es que quede un césped nítido. Para un jardín casero, con algo de paciencia y tiempo lo podemos hacer manualmente. El diente de león es de los compañeros mas habituales del césped, que para quitarlo bien habrá que quitarlo de raíz, ayudándonos de una herramienta especial.

Problemas comunes del césped

  • Calvas: es un mal común. Nos pensamos que cuando hicimos la siembra lo hicimos uniformemente, pero no, pasa mucho. Ahora en esas calvas, hay que airear, descompactar y volver a sembrar. Te hará falta un buen sustrato y agua, y lo demás vendrá solo.
  • Césped amarillento: puede haber dos razones, una la falta de agua y otra el exceso. Se ve fácil. En época estival es más común que sea la primera razón, el césped tiene un aspecto a paja. Cuando es por exceso, el suelo está muy compacto y húmedo.

Con todo esto hemos dado un buen repaso a los problemas más habituales del césped y cómo remediarlos.